CONVIERTE LA DERROTA EN VICTORIA

 “La diferencia entre el éxito y el fracaso se encuentra en las actitudes de cada uno ante los obstáculos, las desventajas, los desalientos y otras situaciones decepcionantes”. - La Magia de Pensar en Grande

La mayoría de las personas no puede levantarse del todo cuando sufre una derrota y llega al punto de huir del fracaso para que no vuelva a perseguirlos. Estas personas se sienten vencidas. Tienen heridas sin cicatrizar de situaciones que las han derrotado. Ahora son extremamente precavidas. Van dando tropezones, esquivando la emoción ganadora de vivir victoriosamente. Se sienten derrotadas, pero luchan por soportar la condena a la mediocridad que el ‘destino’ les ha impuesto.

En cambio, las personas que han triunfado son las que no se rinden, las que, cuando están al borde del fracaso, deciden levantarse, sacudirse la frustración, aprender la lección, olvidar la paliza y seguir adelante. 

Revisa la vida de las personas que han tenido éxito y verás que la mayoría se ha visto afectada por situaciones perdedoras. Han encontrado oposición, desaliento, contratiempos y desgracias personales. Lee las biografías y autobiografías de grandes personas y de nuevo descubres que cada una de ellas podría haberse rendido a los reveses muchas veces. También notarás que han superado grandes y verdaderos obstáculos.

En efecto, no es posible alcanzar el éxito sin encontrar obstáculos, dificultades y contratiempos. Pero es posible utilizar los contratiempos para impulsarse.

Es en la adversidad cuando debemos volver a empezar. Estudiar lo que salió mal, aprender de la experiencia y seguir adelante con una nueva perspectiva. Sin embargo, cuando la adversidad nos golpea, nuestro primer impulso suele ser tan emocionalmente perturbador que no aprendemos la lección. Lamentablemente, nos aferramos tanto a un problema que no vemos nuevas soluciones y enfoques.

Decide ahora mismo rescatar algo de cada tropiezo. La próxima vez que las cosas parezcan ir mal, cálmate y averigua qué ha causado el problema. Así evitarás cometer el mismo error dos veces.

Cinco puntos de referencia que te ayudarán a convertir la derrota en victoria:

1.       Estudia los reveses para alisar tu camino hacia el éxito. Cuando pierdas, aprende, y luego pasa a ganar la próxima vez.

2.       Ten el valor de ser tu propio crítico constructivo. Encuentra tus defectos y debilidades, y corrígelos. No te digas: ‘Esta es otra razón por la que soy un perdedor’; considera tus errores como ‘Esta es otra razón para ser un ganador’.

3.       Deja de culpar a la suerte. Investiga cada contratiempo. Averigua qué salió mal. Recuerda que culpar a la suerte nunca ha llevado a nadie a donde quería ir. En lugar de culpar a la suerte de tus reveses, investiga estos reveses. Si pierdes, aprende. Déjate de frases como ‘Es mi mala suerte’. Empieza a ver las oportunidades para hacerte más grande, más fuerte y más seguro de ti mismo.

4.       Combina la persistencia con la experimentación. Mantente en el objetivo, pero no te golpees la cabeza contra un muro de piedra. Prueba nuevos enfoques. Experimenta.

5.       Recuerda que toda situación tiene su lado positivo. Encuéntralo. Ve el lado bueno y acaba con el desánimo. Ser golpeado es valioso si uno aprende de ello.

Fariddy Yunis